Localización es el proceso de exportar un videojuego de su país de origen a otras partes del mundo, proceso que normalmente se da en los juegos japoneses. La localización no consiste únicamente en “traer el juego pa'cá”, sino que ésto también incluye la traducción a otros idiomas y el contexto narrativo así como la dirección de los diálogos.
La localización puede proporcionar ventajas positivas aparte de la mera traducción del juego, también puede ayudar bastante en el entendimiento de la historia del juego que en su contexto original no sería tan claro para otras culturas. Sin embargo ésto es un arma de doble filo, porque también puede poner en riesgo el contexto original de la obra, así como llegar a recurrir al tema que nos ocupa, la censura.
La censura en los videojuegos ha existido desde siempre, sin embargo vamos a tomar dos ejemplos en específico como referencias: Fire Emblem Fates y Tokyo Mirage Sessions #FE, dado que son casos muy recientes de censura. No criticaré los juegos en sí, pero en general ambos juegos están recibiendo críticas muy positivas y son recomendables para la gente fanática de los RPG y la estrategia. Lo que resaltaremos aquí son la gran censura que han sufrido.

La localización de las versiones occidentales de Tokyo Mirage Sessions #FE censuraría todos los elementos provocatipos, cambiando los bañadores y ropa interior por trajes completos. Éste no sería únicamente un cambio estético, ya que con ello se censuraría bastante uno de los arcos de la historia del juego que se centra en un personaje que antaño fue una modelo erótica y el nivel se centraría en este tema. Y también se le negaría a occidente el acceso a un DLC basado en los populares baños termales de Japón, aun sin mostrarse ningún tipo de desnudo explícito en dicho DLC.
Las versiones occidentales de Fire Emblem Fates por su parte tendrían una “localización” más severa, ya que los elementos provocativos no serían los únicos en ser censurados. En primer lugar un grandísimo cantidad de diálogos se verían cortados y cambiados para dar otro enfoque.También se eliminaría un minijuego que te permite “acariciar” y mimar a tus personajes (Como en Pokémon X/Y) así accediendo a más diálogos y reforzar tu relación con tus personajes, aunque afortunadamente se han conservado dichos diálogos en la localización.

Uno puede pensar que este tipo de censura puede ayudar a acceder al público más infantil sin herir su sensibilidad, pero hay que tener en cuenta una cosa, y es que si bien Fire Emblem y Tokyo Mirage no son videojuegos explícitamente para adultos como un God of War o el Doom, tampoco son videojuegos infantiles como Mario o Kirby. La demográfica que persiguen estos juegos es un público más bien intermedio, el público joven, que por un lado aún tienen cierta sensibilidad pero por el otro ya no son tan niños y pueden empezar a soportar temas más fuertes.
Uno puede pensar que este tipo de censura bajo la mano de una empresa de Nintendo es algo normal ya que Nintendo en el mundo moderno es vista como una empresa dedicada al público infantil, uno debe recordar que ésto no siempre fue así. No todo lo que hacía Nintendo eran personajes simpáticos saltando en un país de colorines, Nintendo también sabía hacer juegos mucho más maduros que presentaban conflictos mucho más serios como Metroid y Zelda.
Esta censura busca generalmente no buscar ofender a nadie con el contenido original del juego, pero lo irónico es que sí termina ofendiendo a los que estaban interesados en el producto; esta gente está ofendida no solo porque se les ha negado el contenido que querían disfrutar, también está ofendida porque sienten que les están insultando a su inteligencia. Les molesta que, el hecho de decidir qué pueden consumir y que no, no sea elección suya, sino de una empresa ajena a ellos.
En mi opinión personal lo mejor es respetar la visión original de la obra, no manipular el contenido el contenido de ésta, y de tener algún contenido ofensivo pues sería mejor darle sus merecidas calificaciones de edad y advertencia más que “azucararlo”. Pero ésa es solo mi propia perspectiva, ya que puede haber gente a la que no le moleste la censura y de hecho piense que la misma ayuda a proporcionar un enfoque mejor para el juego.
Prefiramos las versiones censuradas o sin censurar, no podemos olvidar del valor propio de los juegos.
