El Cabildo de La Palma ha lanzado un innovador proyecto denominado ‘Apoyos a las Familias y Participación en la Comunidad para Personas con Discapacidad’. Esta iniciativa, que se encuentra en sus primeras etapas de desarrollo y se extenderá hasta 2025, tiene como objetivo primordial fomentar la inclusión social y la autonomía de las personas con discapacidad, especialmente aquellas que requieren un mayor apoyo.
La consejera de Acción Social, Ángeles Fernández, subraya la importancia de este programa al afirmar que “queremos garantizar que las personas con discapacidad tengan las mismas oportunidades de participar en la vida comunitaria”. Según Fernández, el proyecto no solo permitirá a los participantes disfrutar de actividades adaptadas a sus intereses, sino que también contribuirá al desarrollo de su autonomía y al fortalecimiento de sus relaciones sociales.
Un enfoque inclusivo
Este programa se integra dentro del Programa para la Modernización en la Gestión y la Transformación en los Servicios, parte del Plan Integral de Empleo de Canarias (PIEC), promovido por el Servicio Canario de Empleo (SCE) con el respaldo del Cabildo Insular de La Palma. Su carácter piloto implica que se implementará inicialmente a pequeña escala, dirigiéndose a una muestra reducida de la población para evaluar su efectividad antes de considerar su expansión.
A través de esta fase experimental, se busca recopilar información clave sobre el impacto del proyecto en la calidad de vida de los participantes y en la mejora del servicio a personas con discapacidad. Los datos obtenidos permitirán valorar su posible consolidación como un servicio estable dentro de la Red Insular de Centros y Servicios para la Autonomía y Atención a la Dependencia.
Actividades diversas y personalizadas
El enfoque del proyecto se basa en la Planificación Centrada en la Persona (PCP), un modelo que adapta los servicios y actividades a las preferencias individuales. Esto asegura que cada participante tenga una participación voluntaria y significativa, promoviendo así su derecho a decidir cómo desean integrarse en la comunidad.
Las actividades abarcan una amplia gama en los ámbitos deportivo, cultural y recreativo, buscando fomentar la interacción social en entornos inclusivos. Las personas beneficiarias podrán optar por asistir a eventos culturales, participar en actividades deportivas o involucrarse en dinámicas recreativas en espacios públicos, siempre contando con el acompañamiento del equipo de atención directa.
Compromiso con las familias
La libertad de elección es fundamental para garantizar el bienestar de las personas con discapacidad”, enfatiza Fernández. Al permitirles decidir sobre su participación en diversas actividades, se fortalece su sentido de pertenencia y motivación. Además, destaca el impacto positivo que esta iniciativa tendrá también sobre las familias: “Queremos que las familias se sientan respaldadas y cuenten con un recurso que respete la autodeterminación de sus seres queridos”, añade.
Para asegurar el éxito del proyecto, se ha conformado un equipo técnico multidisciplinar compuesto por profesionales en educación social, trabajo social y psicología. Este equipo será responsable de la planificación y supervisión del programa. Asimismo, un grupo especializado en atención sociosanitaria brindará apoyo directo a los beneficiarios durante las actividades comunitarias.