En el archipiélago canario, la agricultura ha registrado un aumento de desempleados del 11,07%. Esta actividad fue la que experimentó la mayor disminución porcentual durante el mes pasado. Los servicios siguen siendo los que han sufrido una caída absoluta más grande y tienen mayor peso en la reducción del desempleo en el archipiélago. A nivel nacional, sin embargo, el patrón de disminución del paro sigue siendo igual al mes anterior: la agricultura presenta el mayor cambio porcentual mientras los servicios lo hacen en términos absolutos. En comparación con el mismo periodo del año anterior, el desempleo baja un 9,69% en el archipiélago y un 8,64% a nivel nacional.
En España, uno de cada cuatro habitantes está en riesgo de pobreza y exclusión. Si se aumentan los salarios solo un 8% o 10%, esto generaría más pobreza y desempleo. El aumento del Salario Mínimo Interprofesional ha provocado la destrucción de 71.600 empleos y la exclusión laboral de 145.900 trabajadores, es decir, 217.500 empleos menos entre 2018 y 2022.
Los contratos han disminuido un 15,35%. La dificultad para contratar se ha convertido en el tercer problema más preocupante después de los costos energéticos y las incertidumbres económicas. Según el Banco de España, el 34% de las empresas prevén que la escasez de mano de obra tendrá un efecto negativo en su operación.
La productividad debe ser el factor que determine las subidas salariales, ya que es fundamental para el progreso económico. Esto permite aumentar los salarios sin generar inflación ni desempleo.