La Consejería de Educación, Formación Profesional, Actividad Física y Deportes del Gobierno de Canarias ha lanzado un innovador servicio que utiliza drones para la inspección de infraestructuras educativas. Este nuevo sistema, actualmente en fase de implantación, tiene como objetivo mejorar la seguridad, agilizar los procesos y reducir costes en el mantenimiento de los centros escolares canarios.
Dirigida por Poli Suárez, esta iniciativa se encuentra a cargo de la Dirección General de Infraestructuras y Equipamientos. Gracias a la implementación de sistemas aéreos no tripulados (UAS), comúnmente conocidos como drones, las revisiones de fachadas, cubiertas e instalaciones que son difíciles de acceder se llevarán a cabo de manera más segura y eficiente.
Beneficios del uso de drones
Tradicionalmente, las inspecciones requerían que operarios trabajaran en altura, lo que implicaba riesgos significativos para su seguridad y altos costes asociados al uso de grúas o andamios. Con la nueva flota de drones, estas tareas podrán realizarse en un tiempo reducido y sin exponer al personal a situaciones peligrosas. Además, se prevé una disminución considerable en los gastos relacionados con equipamiento pesado.
“Estamos incorporando herramientas de última generación para que nuestros centros dispongan de un sistema lo más moderno, rápido y eficaz posible”, afirmó Iván G. Carro, director general del área. Según Carro, este servicio no solo optimiza recursos y reduce costes, sino que también permite anticiparse a problemas potenciales, garantizando así la seguridad y el confort de quienes utilizan las instalaciones educativas.
Fase piloto y colaboración técnica
Durante esta fase piloto, llevada a cabo por la Unidad Técnica de Tenerife junto con la asociación cultural del dron FBAvuela, se han utilizado modelos avanzados que permiten capturar imágenes y vídeos con alta precisión. Esto facilita el diagnóstico de problemas como humedades, fisuras y deficiencias en instalaciones fotovoltaicas.
Los datos obtenidos no solo serán utilizados para análisis internos, sino que también se compartirán con ayuntamientos y empresas constructoras para planificar acciones de mantenimiento con mayor eficacia. La formación del personal encargado incluye la habilitación como operadores e instructores de drones, asegurando así el cumplimiento normativo y la seguridad durante las operaciones.
Compromiso con el patrimonio educativo
El proyecto contempla el uso inmediato de drones para inspecciones puntuales tras incidentes o durante obras en curso. También se planean revisiones periódicas a medio y largo plazo para cubiertas, fachadas y otras instalaciones energéticas.
Con esta apuesta por la innovación tecnológica, la Consejería refuerza su compromiso con la conservación del patrimonio educativo en Canarias. Las iniciativas buscan optimizar recursos mientras garantizan la seguridad de las comunidades educativas, contribuyendo así a mejorar la calidad educativa en las islas.