
La cantante y exvocalista del grupo Mecano
Ana Torroja se ha acogido a su derecho de
no declarar ante el juez instructor del ‘caso Relámpago’,
Antoni Garcias, quien le había citado como imputada después de que la Agencia Tributaria le atribuyese el impago de tres cuotas tributarias que ascenderían a alrededor de medio millón de euros. Unos hechos por los que le atribuye tres nuevos delitos fiscales que se suman a los que ya pesaban sobre la artista en el marco de esta causa.
Ataviada de negro, con gafas de sol y pelo corto y rubio, Torroja llegó a los Juzgados de Vía Alemania una hora antes de lo previsto. A las 9.30 horas, la encausada atravesaba la puerta de las dependencias judiciales declinando hacer declaraciones a los numerosos medios congregados, y tan sólo media hora después abandonaba el edificio acompañada por su abogado
Ildefonso González-Grano de Oro. Por segunda vez desde que ya en junio de 2009 fuese citada dentro de esta misma causa, la artista se había negado a declarar.
El magistrado le imputa
tres nuevos delitos fiscales que se suman a los otros que ya pesaban sobre la artista en el marco de esta causa, y expone que en total la encausada habría dejado de pagar al fisco más de un millón de euros.
Así lo han señalado fuentes jurídicas a
Europa Press, que han recordado que inicialmente, Hacienda le achacó una deuda fiscal de
655.000 euros tras detectarse sus vínculos profesionales con el despacho de abogados Feliu de Palma, asesoría legal sobre la que pesan varias sospechas de estafa investigadas en este procedimiento. En concreto, calculó que Torroja habría defraudado una cuota de unos 475.000 euros en 2006 y unos 180.000 en 2007.
La imputada, defendida por el abogado
Ildefonso González-Grano de Oro, fue por ello citada a declarar en junio de 2009 por el titular del Juzgado de Instrucción número 7,
Antoni Garcías, ante quien entonces se acogió a su derecho de no declarar. La cantante iba a ser interrogada en torno a las supuestas relaciones de su empresa
Carlitos Way con el despacho Feliu, que según las pesquisas realizadas hasta ahora habría urdido un entramado millonario de fraude fiscal.
Torroja
pidió además la nulidad del caso y que asimismo se declarasen nulos como pruebas los registros llevados a cabo en el bufete Feliu así como los pinchazos telefónicos realizados en las investigaciones de esta supuesta trama de evasión fiscal, investigada desde abril de 2007. No obstante, el juez rechazó el recurso de quien fuese la voz de Mecano.