Medidas sin apenas coste presupuestario podrían ampliar la oferta y bajar los precios de forma inmediata”, recalcó.
En su intervención, también advirtió sobre la creciente inseguridad jurídica y la inestabilidad política que están frenando la inversión, especialmente internacional, así como la necesidad urgente de que el Gobierno de Canarias cumpla con su compromiso de bajar el IGIC.
Por su parte, José Miguel González subrayó dos factores clave que agravan las distorsiones del mercado laboral: el incremento del absentismo laboral y la falta de encaje entre la oferta y la demanda de empleo. “La brecha entre los puestos de trabajo ofertados y la elevada tasa de paro sigue siendo preocupante. El absentismo laboral se sitúa por encima de la media nacional, y muchas vacantes siguen sin cubrirse, lo que refleja un desajuste estructural que debemos abordar con urgencia”, indicó.
Más allá de los datos, el informe pone sobre la mesa la necesidad de actuar. El encarecimiento del mercado inmobiliario, la presión migratoria sin recursos suficientes y la falta de Presupuestos Generales del Estado son elementos que alimentan la incertidumbre institucional.
Desde CEOE Tenerife se hace un llamamiento a reforzar la colaboración público-privada, a acelerar la ejecución de los fondos europeos y a situar al tejido empresarial en el centro de la estrategia económica. Porque, como concluyó Pedro Alfonso, “solo si creamos un entorno favorable para las empresas, podremos generar oportunidades de calidad para las personas”.