El primer ministro Benjamin Netanyahu, con una programa electoral de marcado tinte belicista ha vuelto a ganar las elecciones. Los tres sondeos a pie de urna publicados tras el cierre de los colegios electorales en Israel pronostican una clara victoria de los partidos afines al primer ministro Benjamin Netanyahu, que se queda incluso a las puertas de la mayoría absoluta.
Channel 13 y Channel 12 han actualizado sus sondeos previos para incluir las dos últimas horas de votación en las elecciones y los nuevos datos sitúan al partido de Netanyahu un escaño por debajo de los resultados iniciales, cuando se pronosticaba que el bloque que le apoya conseguiría 60 asientos de los 120 que componen la Knesset o Parlamento israelí. La mayoría absoluta se sitúa en 61 escaños.
El nuevo estudio publicado por Channel 13 otorga al Likud de Netanyahu 37 escaños, por delante de su principal rival, el partido Azul y Blanco de Benny Gantz, que obtiene 34, dos más que en el sondeo anterior. La tercera fuerza volvería a ser la Lista Conjunta árabe-israelí con 14 asientos.
Tras conocerse los resultados de los sondeos a pie de urna, el propio Netanyahu habría llamado por teléfono a sus aliados y habría coincidido con ellos en la necesidad de formar un "gobierno nacional fuerte", según han informado fuentes del Likud citadas por la prensa israelí.
"Es una gran victoria para Israel", ha publicado Netanyahu en hebreo en su cuenta en Twitter poco después de un mensaje con un escueto "gracias" lanzado poco después de conocerse las encuestas a pie de urna.
La otra cara de la moneda es Azul y Blanco. En la sede central del partido en Tel Aviv las encuestas han sido un mazazo: "La sensación principal es la decepción", ha apuntado el activista Nachum Schwartzberg en declaraciones a 'The Times of Israel'.
Mientras, el que podría ser partido bisagra, Yisrael Beytenu, ha reiterado a través de su líder Avigdor Liberman que no se sumará a un gobierno de coalición de Netanyahu con presencia de los ultraortodoxos Shas y Judaísmo Unido de la Torá. "Somos un partido de principios", ha subrayado.
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