Bien, una nueva Navidad nos espera. Ya está a la vuelta de la esquina y de nuevo emerge la navidofobia y la navidofilia, como estados emocionales transitorios y adaptativos a estos 7 u 8 días en los que la sobre estimulación interna y externa nos inunda. ES difícil la equidistancia y la neutralidad navideña, a pesar de que algunas personas la viven como “unos días más”. La alquimia cerebral se sobre activa y la música límbica resuena más, a veces de forma armónica ,evocadora y conmovedora y a veces como una orquesta desafinada que nos remueve, nos inquieta y nos desestabiliza. Todo se amplifica más en esta caja de resonancia que es la Navidad.
El cerebro trabaja a destajo y sobre consume neurotransmisores que a veces nos serenan, otras nos alteran, nos narcotizan y nos vuelven más cálidos o no. Para muchos la navidad es un caleidoscopio emocional donde nuestro cerebro rescata experiencias infantiles cariñosas que pueden alternar con recuerdos autobiográficos amargos y tristes. En la navidad emergen muchos relatos y es una buena etapa para intentar resignificar aquellos que llevan adjuntos archivos emocionales cargados de emociones negativas y de amargura. Para muchos el sobreconsumo, lo externo y lo inmediato también prevalecen en la navidad mientras que para otros lo íntimo, lo interno y lo espiritual son prioritarios.
Hay muchas personas que se re-sienten y están muy doloridas en estas fechas en las que la algarabía social se dispara más.
La navidad es a veces un mojón que señala los duelos y las ausencias.El 32% de los jubilados se sienten solos en Navidad, es la solo-edad inhóspita e impuesta aderezada con la indigencia, el maltrato y el abandono. Es la soledad percibida que denota la mala calidad y calidez de los vínculos que se tienen.Construyan su navidad sin exigencias. La navidad es un reto para humanizar el espacio familiar y social. La navidad nos convoca a dejar la quejorrea narcisista en stand bye.
La navidad es un buen test de stress para nuestra ITV emocional y para inspeccionar nuestras tácticas vitales. Nos permite calibrar como controlamos nuestra atención fallofilica y nuestro control de los esfínteres superiores a través de los que despellejamos y contaminamos al prójimo Si no les gusta háganla agridulce como la comida china. Hagan el balance anual desde una sana autoestima .No existe las navidades, existe la navidad del 2018 .Viva en el recuerdo de las ausencias y acompáñese bien, tanto interna como externamente.
Valoren más y reflexionen más que nunca, cuan de fértil han vivido y sobre todo como decidirán vivir su tiempo.Y con respecto a los apegos a los que estamos atrapados: no te preocupes nunca por las personas de tu pasado: hay una razón por la que no están en tú presente y por la que no llegaron a tu futuro. También es útil y conciliador con nuestro pasado el trasformar el “así fue por el así lo quise yo”.
Todo tiene su momento, y cada cosa su tiempo bajo el cielo. Ahora ennavidense.
El mallorquín tiene una frase mágica, a modo de mantra zen, díganla y compártanla desde el corazón: MOLT D´ANYS. Prospero 2019.
Ah y recuerden que podemos estar en derrota transitoria pero nunca en doma.
Si (
No(
