El Consejo de Ministros ha dado un paso significativo en la protección del medio ambiente y los derechos de los consumidores al aprobar el Anteproyecto de Ley de Consumo Sostenible. Esta nueva normativa, presentada por el Ministerio de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030, incluye medidas que prohíben la publicidad de vuelos cortos cuando existe una alternativa menos contaminante con una diferencia de duración no superior a dos horas y media.
Además, se vetará la promoción de combustibles fósiles y de vehículos que funcionen exclusivamente con estos. La ley también tiene como objetivo regular la denominada publicidad del miedo, combatir el greenwashing y fomentar la reparabilidad de productos, entre otras iniciativas.
Nuevas restricciones publicitarias
Entre las prohibiciones más destacadas se encuentra la limitación a la publicidad de productos energéticos derivados exclusivamente de fuentes fósiles, excluyendo el gas. Esta medida busca reducir la promoción de energías contaminantes que contribuyen al cambio climático.
Asimismo, se establece que no se podrá anunciar vuelos cortos si hay alternativas más sostenibles disponibles, aplicándose únicamente dentro del territorio peninsular. También queda prohibida la publicidad de vehículos impulsados solo por combustibles fósiles.
Regulación del miedo en la publicidad
La ley abordará también el fenómeno conocido como publicidad del miedo, que utiliza tácticas alarmistas para influir en las decisiones de compra. El Ministerio de Consumo pretende crear un entorno publicitario responsable donde se priorice información objetiva sobre los beneficios reales de los productos, evitando manipulaciones emocionales.
Las comunicaciones comerciales deberán ir acompañadas de datos cuantitativos o estadísticos que permitan a los consumidores evaluar el riesgo real asociado a lo que se les ofrece.
Lucha contra el ecopostureo y obsolescencia programada
Otra meta clave del Anteproyecto es erradicar prácticas engañosas relacionadas con el ecopostureo o greenwashing. Se prohibirán afirmaciones genéricas sobre sostenibilidad sin respaldo científico, tales como “respetuoso con el medio ambiente” o “biodegradable”. Con ello, se busca establecer relaciones comerciales más transparentes y responsables.
La ley también combatirá la obsolescencia programada, incentivando la reparación durante el periodo legal de garantía y extendiendo este plazo si se opta por reparar en lugar de reemplazar. Además, se obligará a los productores a asumir parte del coste de reparación tras finalizar dicho plazo.
Regulación en reventa y reduflación
En cuanto a la reventa de entradas para eventos culturales o deportivos, la norma prohibirá aumentos en su precio superior al IPC desde su compra inicial. Esta regulación busca frenar prácticas abusivas en este ámbito. Asimismo, se abordará el fenómeno conocido como reduflación, donde se reduce el contenido o número de unidades vendidas sin aviso previo mientras aumenta el precio por unidad.
Las empresas tendrán un plazo máximo para informar claramente sobre cualquier cambio en las características del producto comercializado. Con estas medidas, el Ministerio reafirma su compromiso hacia una transición ecológica justa y un modelo económico sostenible.
A partir de ahora, el anteproyecto entrará en fase de audiencia pública para recoger aportaciones antes de ser debatido nuevamente en el Consejo de Ministros y enviado al Congreso para su aprobación final.