La II convención de Turismo de Canarias celebrada el pasado martes no nos deja indiferentes.
La oferta de calidad por la que apuesta el Gobierno de Canarias es la hotelera, según ellos mismos manifiestan (de sobra conocido por todos), minimizando la oferta extra hotelera (entre la que está la VV) y reduciendo los hoteles de 1,2 y 3 estrellas en pro de los de 4 ó 5 estrellas.
De esta forma, se suben los precios y se aumenta el ADR de los visitantes.
Pero, lo que no dicen es que ese dinero se va fuera de Canarias , dicen que es falso que no se crean puestos de trabajo de calidad, que hay ejemplos de lo contrario.
Alguien debería aclararles que la mayoría de los canarios somos ciudadanos de a pie y no excepcionalidades. Alguien debería explicarles qué es lo que vivimos en primera persona y qué es lo que sufrimos, alguien debería explicarles que 1 de cada 3 residentes canarios está en situación de riesgo y precariedad (el 33,8%).
Alguien debería decirles que todavía la VV no ha llegado a cubrir la pérdida de plazas extrahoteleras de Canarias de los últimos años, a pesar del efecto llamada que ellos mismos han provocado con la ley anti VV.
Tampoco manifiestan nuestros responsables políticos (porque no forma parte de su hoja de rutas) que algunas modalidades extrahoteleras como la VV hacen que nuestros visitantes realicen el 51% de su gasto fuera de los alojamientos favoreciendo la economía local y generando oportunidades más allá de ser considerados como mera "mano de obra". Los visitantes de los hoteles, en cambio, sólo hacen el 34,85% de su gasto fuera de los hoteles y, claro, para el Gobierno de Canarias la VV no presta los servicios cualificados ni de calidad que hay que promover y proteger, pero, en cambio, sí que ayudamos a que aumente el gasto turístico y lo más importante, que es gasto se quede en nuestra tierra para un mayor bienestar de los nuestros.
Se vanaglorian de ser un Gobierno que escucha a la ciudadanía de manera activa, pero, en la consulta pública de nuestra ley, se hizo caso omiso a las 5083 alegaciones presentadas, de las cuales, 2/3 partes de las mismas se manifestaban contrarias a esta ley anti VV que ahora está en el Parlamento.