Todo esá trabucado

Trabucado es el participio del verbo "trabucar", que tiene tres acepciones en el Diccionario de la Lengua Española, todas válidas para la ocasión, a saber: confundir una cosa con otra; alterar la colocación o el orden correcto de algo o equivocarse al hablar o escribir, cambiando palabras, sílabas o letras por otras.

Si nos fijamos bien, todo lo dicho sucede en nuestra sociedad, especialmente entre la clase política y sobre todo en las redes sociales. Parece que vivimos en un mundo al revés o vuelta abajo, porque lo que se tiene que hacer no se ejecuta, pero se promete y así queda bien. Por ejemplo, seguimos todos los días en las colas de nuestras vetustas carreteras y también con la salida del sol, aparece una nueva ocurrencia sobre movilidad para entretener al personal, pero soluciones válidas ninguna.

No hay manera que nadie escuche al otro, todos son discusiones estériles, de patio de colegio, pero escenificadas por adultos de manera vergonzosa. Una sociedad torpemente infantilizada deliberadamente, para controlarla mejor. Sobra perturbación y falta sensatez