Advierte a Josefa Mesa que si el acercamiento que pretende con el Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife “es algo al margen de la ley, eso se llama prevaricar”
La consejera insular Ana Zurita ha solicitado al Cabildo de Tenerife que centre sus esfuerzos “en ser constructivo y en animar a rehabilitar la recuperación de los centros históricos de la ciudad de Santa Cruz de Tenerife en lugar de entorpecer su desarrollo y propiciar que proliferen la basura y las ratas”.
En esta línea, Zurita reclamó al presidente del Cabildo de Tenerife, Carlos Alonso, que exija al área de Patrimonio que se dote de “un programa claro de objetivos, una programación temporal de actuaciones y una ficha financiera para llevarlas a cabo porque lo que vemos hasta la fecha es una ausencia total de criterios y decisiones arbitrarias que perjudican, y mucho, al patrimonio isleño”.
“La responsabilidad última de lo que está ocurriendo en Santa Cruz de Tenerife es del presidente de la corporación, que no puede permitir que se estén produciendo en determinadas áreas de la corporación actuaciones que entorprecen seriamente al desarrollo de municipios tan importantes para la isla como la cocapital de Canarias”, añadió.
Ana Zurita se expresó así ante la decisión de la corporación insular de fecha 11 de Diciembre de 2017 de suspender cautelarmente las obras iniciadas en el número 23 de la calle Puerta Canseco apelando a informes emitidos unilateralmente por un técnico del Servicio Administrativo de Patrimonio Histórico del Cabildo Insular en atención al supuesto valor patrimonial como ejemplo de arquitectura histórica del citado inmueble.
Zurita recriminó a la consejera del área, Joséfa Mesa, esta decisión y la acusó de “querer hacerse notar”, para lo que, dijo, “lo que tiene que hacer antes de tomar una determinación drástica como la que se ha tomado suspendiendo las
obras con licencia municipal es exponer con claridad los criterios urbanísticos, históricos, tipológicos, constructivos, económicos y sociales que lo justifican”. “Lo que pasa”, añadió, “es que este Cabildo carece de tales criterios y por ello le animo a establecerlos y a ponerse a trabajar en base a ellos”.
La consejera explicó que aunque este inmueble fue propuesto para su catalogación en orden a su protección, no figura en el catálogo correspondiente porque su inclusión fue denegada, junto con otra serie de inmuebles. De ahí la falta de legitimación del área de Patrimonio del Cabildo para suspender unas obras que cuentan con la correspondiente licencia municipal.
La arquitecta y urbanista explicó que, para considerar que un inmueble tiene que estar catalogado como edificio a proteger, tienen que cumplirse los siguientes requisitos:
- Análisis de su situación, urbanísticamente hablando. No es lo mismo un inmueble aislado que dentro de un conjunto urbano consolidado.
- Si está dentro de un conjunto urbano consolidado, analizar el papel que desempeña dentro de él, si es un pieza urbana de referencia, si es un elemento aislado que aporta valor al conjunto, si tiene valor urbanístico dentro del trazado, serie de parámetros que siempre han de ser medibles y cuantificables.
- Análisis de la totalidad del edificio, no sólo fachada, y de sus elementos tipológicos esenciales para ver si realmente tienen valor. Si tienen valor, analizar aquellos que le den sentido al volumen.
- Analizar el grado de conservación y establecer si en los casos de ruina es viable la rehabilitación o no.
Ana Zurita añadió que es un función de estos parámetros que el responsable del catálogo debe hacer su propuesta dentro de las alternativas de grados de protección que te da la Ley de Patrimonio, propuesta que posteriormente se somete a la consideración de los órganos que tienen responsabilidad para su aprobación.
“Esto es un procedimiento puramente objetivo y cuantificable y que obedece a unos criterios establecidos legalmente”, puntualizó para recriminar a Josefa Mesa que pretenda tener un acercamiento con el Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife por la vía de la suspensión cautelar de las obras del número 23 de
Puerta Canseco. “¿A qué tipo de acercamiento se refiere? Porque si el acercamiento del que habla es pretender pactar algo al margen de la ley eso se llama prevaricar”, dijo.
Según Ana Zurita, el entendimiento entre Cabildo y los municipios respecto al Patrimonio Histórico “se debe producir en el momento en que se informa el Plan General, o cualquier Plan urbanístico y en la probación de idoneidad de los informes que se emiten por el órgano correspondiente”. Además, y según explicó, la denegación de la protección de los inmuebles relacionados en el informe del Cabildo previo a la aprobación del Plan General no fue un error, sino la confirmación de que no había criterios suficientes para establecer esa protección ni en el inmueble de Puerta Canseco ni en otros varios”.
La consejera acusó a Josefa Mora de querer “preservar lo viejo por viejo, sin ningún otro criterio técnico o legal que lo avale, causando así más daño del que ya se la ha causado por parte de este Cabildo para recuperar su Patrimonio a Santa Cruz de Tenerife”.
Según indicó, el principal problema que tiene el área de Patrimonio del Cabildo de Tenerife, y que en esta ocasión están pagando los promotores del inmueble cuyas obras ha suspendido cautelarmente en la calle Puerta Canseco, “es que no tiene objetivos ni criterios claros y concibe las actuaciones en la isla como un semillero de obras inconexas con criterios dispares, tanto en las actuaciones aisladas como en los Conjuntos Históricos”.
Esa la razón, según Zurita, de que no exista “una programación clara sobre el desarrollo de los Planes Especiales, o sobre el supuesto programa de subvenciones para rehabilitación del Patrimonio a inmuebles privados”.
“Tal es la incoherencia en la que se mueve el área de Patrimonio del Cabildo”, dijo, “que se mezclan una actitud excesivamente proteccionista en asuntos que no le competen, como es el caso del edifico de Puerta Canseco, con una actitud de eludir responsabilidades, ya que en lo que llevamos de legislatura los únicos expedientes que han traído al pleno en relación a los Conjuntos Históricos es la posibilidad de eximir a los Ayuntamientos sin Plan Especial en esta materia de pedir autorización al Cabildo para determinados tipos de licencias, muestra de que son incapaces de liderar un programa eficaz de desarrollo de los planes de estos conjuntos”.