Dicen que nunca se rinde. El Sevilla ha hecho honor a su lema eliminando este jueves por la noche, con remontada y prórroga incluidas, a la Juventus y disputará la final de la Europa League. Su rival será la Roma de Mourinho, verdugo en la otra semifinal del Leverkusen de Xabi Alonso.
Con el Sánchez Pizjuán a reventar, el Sevilla ha buscado desde el principio el pase a su séptima final de la segunda competición continental más importante a nivel de clubs. Pese a ello, han sido los italianos, hoy luciendo su segunda equipación, quienes se han avanzado en el marcador gracias a un tanto del serbio Vlahovic en el minuto 65.
Tan solo seis más tarde, Suso ha sacado a pasear su exquisita zurda para armar un disparo que se ha colado por la escuadra para forzar un prórroga en la que un testarazo del inicialmente suplente Erik Lamela ha valido la clasificación para éxtasis de los seguidores locales.
Ahora, el conjunto del barrio de Nervión luchará el 31 de mayo en Budapest (Hungría) por volver a alzar una competición en la que ha ganado las seis finales disputadas hasta la fecha. Middlesbrough (2006), RCD Espanyol (2007), Benfica (2014), Dnipro (2015), Liverpool (2016) e Inter de Milán (2020) han sido sus víctimas.
En la final se medirá a una Roma, vigente campeón de la Conference League, que cuenta en su palmarés con una Copa de Ferias (1961), antecesora de la Copa de la UEFA hoy llamada Europa League.
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