La Consejería de Derechos Sociales, Igualdad, Diversidad y Juventud, a través de la Dirección general de Dependencia y Discapacidad, ha gestionado en los dos últimos años un total de 20.295 valoraciones y resoluciones de grado de discapacidad a personas que han solicitado reconocimiento.
En concreto, en el año 2021, se atendió a 12.275 personas a las que se les valoró y resolvió el grado de discapacidad tras su solicitud de reconocimiento, un total de 4.255 más que en 2020, es decir, un 53% más de resoluciones gestionadas.
La consejera Noemí Santana, señala que “el esfuerzo que se ha realizado en el área de Derechos Sociales, con la incorporación de personal, comienza a dar sus frutos y nos pone en el camino adecuado para situar a Canarias en el lugar que merecen las personas con discapacidad”.
A través del reconocimiento de la discapacidad se valoran las situaciones que provocan la discapacidad, tanto en el ámbito de la salud física y mental como en el aspecto social (entorno familiar, situación laboral, educativa y cultural), que genera dificultades para la integración social de la persona.
Para obtener el reconocimiento inicial o solicitar la revisión del grado de discapacidad, los solicitantes son valorados por los equipos multidisciplinares de los Centros Base de atención a personas con discapacidad, que serán los encargados de determinar si las personas presentan deficiencias físicas, mentales, intelectuales o sensoriales que, al interactuar con diversas barreras, puedan impedir su participación plena y efectiva en la sociedad, en igualdad de condiciones con los demás.
El reconocimiento de un grado de discapacidad igual o superior al 33% permite ejercer los derechos que las personas con discapacidad tienen reconocidos en todo el territorio español y acceder a distintos beneficios, prestaciones y servicios.