Dependencia

Mientras la Consejera de Derechos Sociales Dña. Noemí Santana presume de buenos datos en Dependencia, los usuarios siguen falleciendo en sus domicilios o clínicas concertadas, los cuidadores esperando un servicio público que les descargue física y emocionalmente y el personal de la Consejería continua dando la cara por un servicio que les da la espalda.

Dña. Marta Arocha llegó pisando fuerte pero los traspiés se suceden cada vez con mayor frecuencia, pues su palabra no tiene ninguna validez y ponen en evidencia el valor que le da al personal bajo su dirección así como al ciudadano que depende de su gestión.

Desde que en el mes de octubre de 2022 se comprometiera a dar respuesta a las múltiples problemáticas que se le plantearon por parte del Comité de Empresa así como a los escritos presentados por la sección sindical, no se ha vuelto a saber de ella.

Pero no sólo ella tiene el don de la “invisibilidad”, puesto que el Jefe de Servicio del Centro Base sigue siendo todo un misterio para sus trabajadores ya que no se ha dejado ver tras un año y medio en el Servicio, Pero esa ausencia es sólo física pues con el beneplácito de la Directora General se ha permitido desorganizar y desmantelar el Centro Base de Discapacidad, saltándose la normativa vigente sin comunicar ni negociar con los representantes de los trabajadores aspectos básicos que afectan a la organización y funcionamiento del trabajo. Una vez más, esa gestión unilateral y en ocasiones dictatorial afecta a los usuarios más indefensos y desfavorecidos de la sociedad.

En cuanto al personal Valorador/a y Técnicos/as Medio del Servicio de Dependencia, éstos siguen “mendigando” medios para poder llevar a cabo sus funciones, denunciando la falta de personal, las excesivas listas de espera, los criterios impuestos a los técnicos sin consenso por parte de éstos etc.

Por último “El Teletrabajo”, ese gran desconocido para la Administración, claro está, cuando no requiere hacer uso del mismo por interés propio pero nunca como un derecho de los trabajadores/as y como objetivo del siglo XXILa Modernización de las Administraciones Públicas, de ahí los criterios tan discrecionales usados no sólo entre Consejerías sino dentro de una misma, como en el caso de la Dirección General de Discapacidad y Dependencia.

Para terminar, solidarizarnos con los cargos políticos porque entendemos que estamos en año electoral, sabemos lo que eso conlleva y el equipo de Gobierno de nuestra Consejera ha dejado muy claro cuales son sus prioridades.

El liderazgo no consiste en estar al mando, sino en cuidar de las personas a tu cargo
Simón Sinek