Venecia se enfrenta a la segunda peor inundación de su historia, solo comparable a la que se produjo en 1966. La marea alta ha alcanzado esta noche los 187 centímetros, mínimamente por debajó de la que tuvo lugar hace 53 años. La ciudad se ha movilizado para reparar los cuantiosos daños materiales provocados por la acumulación de agua en plazas y calles, y también en el interior de edificios. De hecho, monumentos venecianos tan emblemáticos como la Basílica de San Marcos han resultado inundados.
Igualmente, el desastre natural ha provocado ya una primera víctima mortal, concretamente un hombre residente en la isla de Pellestrina, uno de los numerosos territorios insulares que forman parte del litoral de Venecia.