La atención directa está alterada en el 45,5 % de los niños, la hiperactividad en el 30,8 % de los casos y el déficit de atención en el 53,8 %, según recoge el "Documento de consenso del síndrome de apneas-hipoapneas durante el sueño en niños", publicado en Archivos de Bronconeumología, la revista científica de la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (Separ).
En el documento se cifra la comorbilidad de los trastornos respiratorios del sueño y el trastorno de déficit de atención con hiperactividad (TDAH) en un 23 %.
El síndrome de apneas-hipopneas del sueño (SAHS) en la infancia es un trastorno respiratorio del sueño, que se caracteriza por una obstrucción parcial prolongada de la vía aérea superior o una obstrucción intermitente completa que interrumpe la ventilación normal durante el sueño y los patrones normales del mismo.
Se asocia habitualmente con síntomas que incluyen el ronquido y trastornos del sueño.
El SAHS infantil, según se explica en el documento, tiene una entidad clara con perfiles muy diferenciados con respecto al del adulto en lo referente a etiología, presentación clínica y tratamiento.
Este síndrome es una patología con una prevalencia alta en la edad infantil, que afecta entre un 2 y un 4 % de niños con edades comprendidas entre los 2 y los 6 años.
Solo roncar puede afectar a las funciones neurocognitivas y el porcentaje de niños que ronca supera al del SAHS: del 7 al 16 % entre los 6 meses y los 13 años, y del 5 al 14 % en adolescentes.
La hipertrofia amigdalar y adenoidea, las malformaciones craneofaciales, la obesidad, las enfermedades neurológicas como la parálisis cerebral infantil, las patologías neuromusculares, el reflujo gastroesofágico y la obesidad son algunos de los factores de riesgo que con mayor frecuencia se presentan en la infancia.