El Cabildo de Lanzarote ha tomado la iniciativa de solicitar la declaración de emergencia cinegética en varias fincas agrícolas situadas en los municipios de Tías, Yaiza y Tinajo. Esta medida busca hacer frente a la sobrepoblación de especies como la perdiz moruna, que está causando daños considerables en cultivos de batata.
La decisión se fundamenta en informes elaborados por el Área de Agricultura del Cabildo, que indican pérdidas en la producción agrícola que pueden alcanzar hasta el 15% en algunas parcelas. En Tías y Tinajo, los agricultores han señalado que las afectaciones son provocadas por perdices, mientras que en Yaiza se han identificado daños atribuibles a roedores o conejos.
Protocolo de actuación y medidas estructurales
Dada la dificultad para autorizar la caza en áreas cercanas a viviendas, el Cabildo ha diseñado un protocolo de actuación que incluye la captura selectiva mediante trampas tipo Tomahawk. Este enfoque tiene como objetivo trasladar los ejemplares a zonas no agrícolas donde no representen una amenaza para la producción.
“Estamos tomando decisiones basadas en criterios técnicos y con responsabilidad hacia nuestro territorio y nuestros agricultores”, afirmó Oswaldo Betancort, presidente del Cabildo de Lanzarote. “Desde el primer momento hemos solicitado informes a las áreas competentes y hemos explorado medidas estructurales, como la ampliación de los días de caza, para lograr un control más eficaz de la población cinegética en Lanzarote y La Graciosa”, añadió.
Colaboración con cazadores y seguimiento diario
Samuel Martín, consejero de Caza y Medio Ambiente, destacó que esta acción es resultado de un trabajo técnico riguroso que responde tanto a una urgencia inmediata como a una problemática estructural que afecta los suelos agrícolas. “Estamos en contacto constante con los colectivos de cazadores, cuya colaboración es esencial para avanzar hacia una gestión sostenible del medio rural”, comentó.
Además, Martín indicó que el control será llevado a cabo únicamente por personal autorizado y en coordinación con los agentes medioambientales del Cabildo. Se implementará un sistema de seguimiento diario de las trampas para asegurar el bienestar animal y la efectividad de las medidas adoptadas. “Se espera que estas acciones comiencen una vez se obtengan las autorizaciones necesarias por parte del Gobierno de Canarias”, concluyó.
Marco legal y plan técnico
La solicitud de declaración de emergencia cinegética se sustenta en el artículo 26 de la Ley 7/1998 de Caza de Canarias, que permite a los cabildos intervenir ante situaciones donde hay una sobreabundancia de especies cinegéticas que representan un riesgo para la agricultura. El plan técnico contempla la captura de hasta 30 ejemplares por zona, los cuales serán evaluados previamente por veterinarios para asegurar su estado saludable antes del traslado.