La celebración del Día de las Fuerzas Armadas ha tenido como escenario Santa Cruz de Tenerife, donde más de 3.260 militares han desfilado arropados por miles de ciudadanos y con la presencia del rey Felipe VI.
Los militares que ha desfilado pertenecen a las tres armas (Tierra, Armada, Ejército del Aire y del Espacio), la Unidad Militar de Emergencias (UME), Guardia Real y Guardia Civilen un recorrido de 1.120 metros desde la confluencia de la avenida de Penetración Sur y la avenida de la Constitución hasta la rotonda de Víctor Zurita Soler.
Un desfile en el que no han participado los caballos que tradicionalmente escoltan al rey y los que conforman la agrupación montada, ya que se decidió que no participaran para evitarles el estrés que les supone el traslado desde la península.
A las 11:30 hora local (12:30 hora peninsular) han llegado los reyes en coche y han sido recibidos por la ministra de Defensa, Margarita Robles, el jefe de Estado Mayor de la Defensa (JEMAD), almirante general Teodoro Esteban López Calderón; el presidente de Canarias, Fernando Clavijo, y el alcalde de Santa Cruz, José Manuel Bermúdez.
El himno nacional y la salva de 21 cañonazos han sido secundados por aplausos y vivas a los reyes por parte de los ciudadanos apostados en la zona cercana a las gradas de invitados y en los balcones de los escasos edificios circundantes, algunos engalanados con banderas de España.
Don Felipe, vestido con el uniforme de gala de la Armada, ha pasado revista al Batallón de Honores y posteriormente los monarcas han saludado a las autoridades civiles y militares, ente ellas, el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska.
La llegada de la bandera
Tras el izado de la bandera y el homenaje a los que dieron su vida por España, Felipe VI y Letizia, , han presenciado el salto paracaidista por parte de la patrulla acrobática del Ejército del Aire (Papea) desde 1.000 metros de altura, que ha sido de una absoluta precisión.
El primero en tomar tierra ha sido el cabo Iván García-Estrada, portando una bandera con el emblema del X aniversario de la proclamación del rey, al que minutos después ha seguido el cabo 1º Francisco Vico, con la bandera de España de 24 metros cuadrados y 15 kilos de peso.
Este militar, entrenador de la Papea, a finales del verano dejará el servicio activo para pasar a la reserva después de una vida dedicada al paracaidismo con más de 12.000 lanzamientos y numerosos trofeos y premios en competiciones nacionales e internacionales.
Siete aviones de la Patrulla Águila
El vuelo de siete aviones C-101 de la patrulla Águila, conocidos familiarmente como ‘culopollos’, dibujando en el aire con sus colores la bandera española, ha dado el pistoletazo de salida al desfile aéreo en el que han participado 45 aeronaves, una decena menos de las previstas puesto que algunas no han podido volar por el bajo techo de nubes.
Eurofighter, F-18, Harrier o los helicópteros de la Patrulla Aspa han sobrevolado los cielos de la ciudad ante la atenta mirada de los asistentes, que los han recibido con grandes aplausos.
A continuación, han desfilado las unidades motorizadas, encabezadas por la Guardia Real, y compuesta también por blindados Leopard, carros de combate pizarro o camiones todoterreno. En total, 67 vehículos y 33 motos que han dado paso a la marcha a pie.
Como es habitual, las unidades más aplaudidas han sido la UME y la Legión, que en esta ocasión ha llevado para el desfile a la mascota ‘Camarón’, un macho cabrío de año y medio de pelaje marrón con manchas blancas.
Una nueva pasada de la Patrulla Águila, que este mes celebra su 40 aniversario, ha puesto el punto final al acto central del Día de las Fuerzas Armadas que se celebra cada año el sábado coincidente o más próximo al 30 de mayo, festividad de San Fernando.