El presidente del PP critica la degradación moral y ética del gobierno de Sánchez, abogando por devolver la voz a los ciudadanos y limpiar la vida pública. Acusa al PSOE de corrupción y falta de dignidad, y propone una política migratoria firme. Además, destaca la necesidad de mejorar la Sanidad en España.
El presidente del PP expresa su vergüenza ante la degradación moral, institucional y ética que caracteriza tanto al gobierno como al partido, los cuales se han convertido en parte de la historia política de Pedro Sánchez. Además, hace un llamado a devolver la voz a los ciudadanos, afirmando que “esto va de decencia”.
“Hoy se ha evidenciado que España no es un vertedero televisivo sórdido y cutre. No se puede confundir el sanchismo con la esencia de España. Los españoles no somos un pueblo indigno; lo que tenemos es un gobierno indecente”, proclama.
Es fundamental “limpiar la vida pública” con firmeza y restituir la voz al pueblo español, ya que esto se trata de dignidad. “Estoy preparado para asumir la responsabilidad de devolver a España la altura de su pueblo”, afirma.
“Una señal más de que el PSOE se encuentra en caída libre es lo que ha sucedido hoy: atrapado en sus propias mentiras, en sus trampas y en un sistema totalmente corrompido”, afirma. “Es una verdadera vergüenza”.
Se destaca que España jamás ha contado con un presidente del Gobierno “tan débil”, un partido gobernante “tan corrompido” ni un Ejecutivo “sometido a los chantajes” de individuos que han colaborado con ellos.
El PSOE es acusado de haber sobrepasado “todos los límites de la indecencia política y de la inmoralidad” tras haber “comprado gobiernos y apoyos” utilizando el dinero de todos. Además, se les señala por gobernar “con los que quieren que España fracase”: “Vais a caer todos juntos”.
Feijóo afirma que lo importante no es ganar un Congreso, sino que España obtenga un futuro frente a la "desesperanza, el engaño y el abuso", en el contexto del próximo XXI Congreso Nacional.
Ante la “mentira y la corrupción” del sanchismo, se solicita una España que sea “viva, despierta, unida y con conciencia”: “Hay una España mejor que este Gobierno”.
El objetivo es superar al PSOE “con valor y con valores”, ya que el PP no se va a “agachar las orejas” frente a “tanta degradación”. “No nos vamos a quedar de brazos cruzados ni en las Cortes, ni en los tribunales, ni en la calle”, afirma.
Se señala que “ningún Tezanos, ningún García Ortiz, ningún Conde Pumpido, ni ninguna Leire nos van a convencer de que una mentira es verdad”, así como que un “incumplimiento es tener palabra” o que “los privilegios a los socios son justos”.
Se propone una política migratoria que sea “firme, planificada, ordenada y con sentido”. “Quien venga a delinquir o no respete nuestros valores, se irá por la misma puerta por la que entró”, advierte. Además, enfatiza: “Aquellos que delinquen tienen que ser expulsados del país”.
Se considera “urgente” poner fin al “flujo descontrolado y el efecto llamada” en cuestiones migratorias, así como regular la entrada de personas en España.
La política migratoria del Gobierno es objeto de crítica por su carácter “inexistente”, ya que no existe trato más “vejatorio” que el de distribuir a los menores “como si fuesen paquetería en función de quién gobierna cada comunidad autónoma”. Además, se considera una “irresponsabilidad” mayor hacer que las personas “se echen en brazos de mafias y al mar de cualquier manera”: “El Gobierno Sánchez es el más irresponsable de Europa”.
Se sostiene que la defensa de la Sanidad radica en contar con un número adecuado de profesionales, implementar incentivos para atraer a médicos, activar los equipos y prestar atención a quienes laboran diariamente en el sector. Además, se declara: “Si soy presidente del Gobierno no pondré un pie en Melilla sin traer un Plan para mejorar la Sanidad”.
Feijóo advierte que “yo no he venido a tomaros el pelo” al referirse a un hospital “que no tiene ni camas, ni quirófanos, ni UCI, ni nuevo aparataje”, acusando así a Sánchez de haber ido a Melilla “a inaugurar un hospital y acabar haciendo una visita de obra”.
Se defiende el “derecho a existir” de todos los pueblos y se aboga por la “convivencia en Oriente Medio”: “Es compatible y es lo razonable”, en contraste con un Gobierno de Sánchez que ha quebrantado “todos los consensos”.
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