El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, anunció este martes una rebaja de las tasas aeroportuarias que cobra AENA de un 11% en el período 2017-2021, lo que significa un 2,2% al año. El anuncio fue rápidamente aplaudido por las aerolíneas y también por las comunidades autónomas que así lo habían pedido, como Balears, pese a que la bajada es menor que la solicitada por el Ejecutivo de Armengol. La medida es muy positiva pues en teoría acarreará una bajada del precio de los billetes aéreos (se estima en un 4% anual) y también un aumento de la competitividad turística, que habrá de traducirse en más contrataciones y generación de puestos de trabajo. El Gobierno ha decidido atender al criterio de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), aerolíneas y comunidades autónomas, desoyendo a ANEA, que proponía congelar las tasas.
Desde su privatización parcial, AENA se ha convertido en un ente muy rentable y eso hace que en la actual coyuntura económica y con la previsión de incremento de pasajeros que se prevé en el próximo cuatrienio, el Gobierno pueda rebajar las tasas aeroportuarias, como se le venía demandando por parte de las aerolíneas. Como bien apuntó Rajoy, el sector turístico supone el 11% del PIB y el 13% del empleo en España. Medidas unánimemente reclamadas como esta bajada de tasas, permitirá apuntalar la recuperación económica y mejorar la competitividad del principal sector económico nacional en un momento de incertidumbres derivadas del Bréxit.