Los domingos se paran las noticias. Putin no muerde, Trump no sube aranceles y todo está como dormido, igual que en la guerra de Gila. Siguen con los muertos de Ayuso y la gente dice que la encuentran con mala cara, como si estuviera cansada. He puesto los deportes de Movistar. Hay un partido de pelota vasca desde Pamplona. El frontón está lleno de carteles de Lidl. En el descanso veo un anuncio de Grundig, que ha sacado un televisor ecológico. También se proponen alimentos para el bienestar de los animales. Deben de referirse a las mascotas, que ya son miembros de la familia y sus dueños, o padres, o hermanos, o lo que quieran, votan.
La gente es más buena que antes, pero no se lo crean. Es solo apariencia. Solo son más tontos y más domesticados. Estos vascos del frontón son los mismos de siempre, dando voces en sus apuestas y llevando un chacolí para la merienda. Son buena gente y tienen las manos gastadas de tanto pegarle a la pelota. Las llevan protegidas con esparadrapos y son duras como piedras, igual que todo lo de allí. Euskadi es el gran callo que le sale a España por el norte. A veces se les va la mano y te ponen una bomba lapa, pero ahora se han tranquilizado. Es una cuestión de folclore y de cultura popular. Ellos no tienen la culpa de que los demás no entendamos lo que es un gudari.
Lo mismo nos pasa a nosotros con el siote palmero., o con el baile del vivo, que acaba cuando al bailarín le quitan el sombrero, que siempre coincide con el momento en que el solista acaba de cantar, asegurando insistentemente que no lo sabe bailar. La letra tiene una confesión de progreso: arriba, arriba, arriba iremos y en han llegando descansaremos. El folclore es un misterio. Una copla dice: “Esta que ha cantado ahora es mi amiga y no me pesa, quién la pudiera llevar de corona en la cabeza”. No hacía falta que Westerdahl y Minik nos acercaran el surrealismo porque ya lo teníamos aquí. “No desprecies lo moreno que lo moreno es bonito. Morenos fueron los clavos con que clavaron a Cristo”. A ver quién supera esto. Estas cosas hay que conservarlas antes de que la Inteligencia Artificial arrase con ellas. Si nos descuidamos, el progreso nos dejará sin cultura.
Los domingos no hay nada que hacer. Ahora está jugando el Canarias en Bilbao y a punto de consolidar la segunda plaza, a un punto del Real Madrid. El Canarias es mi equipo, y el de mi hijo, y estamos siempre pendientes de sus resultados. Hay que disponer de estos escapes para seguir viviendo con un poco de optimismo. Ahora va ganando de 2, pero confío en que Vidaorreta maneje la estrategia para traerse el punto para casa. Chus es un genio. Ayer perdió el Unicaja, en Zaragoza, y esa oportunidad no la podemos perder. Hasta ayer estábamos hablando de aranceles y yo me acordaba del fielato de Vista Bella, cuando los cochinos pagaban por entrar en Santa Cruz. Una vez pasaron a uno en un coche, con un sombrero, unas gafas de sol y un puro en la boca. El vista le dijo a su compañero: “¿Te fijaste en la cara de cochino del que iba en el asiento de atrás?” Pues eso es lo que tiene la guerra comercial, que nos van a cobrar hasta por el vinagre y por la sal de frutas. Estoy pensando en hacerme mahometano y pasarme el año haciendo el ramadán.
Si (
No(
