Esta evolución es debida, principalmente, a la bajada de los precios de la electricidad, que subieron en octubre de 2021. También influye, aunque en menor medida, el descenso del gas, frente a la subida del año anterior, y el aumento de los precios por la entrada de la nueva temporada del vestido y calzado, más moderado que en 2021. La tasa de variación anual estimada de la inflación subyacente (índice general sin alimentos no elaborados ni productos energéticos) se mantiene en el 6,2 por ciento.
Los precios de consumo registran en octubre una tasa del 0,4 por ciento respecto al mes de septiembre, según el indicador adelantado del IPC.
Con la moderación registrada en octubre, la inflación suma tres dos meses consecutivos de descensos en su tasa interanual después de que en agosto bajara tres décimas, hasta el 10,5 por ciento, y en septiembre disminuyera 1,6 puntos, hasta el 8,9 por ciento.