Un nuevo tuit de Elon Musk vuelve a hundir la cotización de bitcoin (BTC) y, por ende, la de todas las criptos. Junto a la palabra bitcoin ha colocado un emoji de “corazón roto”. Debajo, una historia de una pareja que discute y ella le dice a él que “ha encontrado a otro”.
Todo empezó hace unos meses cuando en su bio (debajo de su nombre de Twitter), Elon Musk colocó la palabra bitcoin. La cotización subió cinco mil dólares en una hora. Hoy ha añadido un corazón roto a su lado y ha bajado casi cuatro mil. Se cotiza más el amor que el desamor de Elon.
El noviazgo ha durado unos meses. Y es que, desde que ha rectificado diciendo que no iba a permitir comprar sus Tesla con bitcoin, le han salido críticas de todas partes. Y él, en lugar de amedrentarse, se ha venido arriba y ha cortado relaciones.
En su vida privada, Elon ha cambiado frecuentemente de pareja. Se ha casado y divorciado tres veces de dos mujeres. Con la actriz británica Talulah Riley ha hecho ambas cosas por duplicado. Además, ha tenido múltiples relaciones no matrimoniales y fruto de ello son sus 7 hijos. Un turbulento curriculum amoroso para sus 49 años.
Su promiscua vida amorosa con las mujeres deja traslucir lo que ocurrirá con su amor a las criptomonedas. Ahora corta con bitcoin (BTC) y ya ha dejado caer que hay otra en su corazón. Aunque, de fondo siempre le quedará el amor a Dogecoin, una moneda a la que ha llevado a la luna pero que no tiene ninguna utilidad ni desarrollo desde hace años. Pero se ve que solo Doge no sacia sus pretensiones criptoamorosas.
A Elon se le acusa de manipulación del mercado pero, la mayoría de veces, está manifestando una opinión. Y disfruta con ello. Ahora lo mando todo a la luna y ahora al hoyo. Pero no es culpa de Elon. El mercado está en una fase tan pueril y muestra tal inseguridad que le basta poco para ser manipulado. Un mercado que se precie no debería depender de un tuit, salvo que incorpore algo relevante para el ecosistema o para un proyecto en concreto.
Si Elon ha cortado con bitcoin (BTC) a los inversores les debería dar igual. El valor intrínseco de una moneda, de un token o de un proyecto no es mayor ni menor por la opinión ni el estado amoroso de Elon. La prensa rosa no debería afectar el valor de la cartera del resto del creciente número de inversores en criptomonedas.
Pronto conoceremos en “Criptocorazón, criptocorazón” quien ha pasado a ocupar el espacio que deja bitcoin (BTC) en la vida de Elon. Se antoja una buena subida de su cotización. Pero ojo que es efímera. A Elon le gusta cambiar con frecuencia de pareja. La curiosidad será ver cómo se toma bitcoin (BTC) en su precio el ataque de cuernos.