
Tenerife está viviendo una escalada de tensión a nivel turístico, que preocupa ya a la sociedad canaria, enfrentándose a un fenómeno alarmante conocido como turismofobia. Esta expresión de rechazo y hostilidad hacia el turismo, puede dejar una huella significativa en la industria turística y por ende poner en peligro el empleo en nuestro archipiélago.
Las manifestaciones de turismofobia, han llegado a las islas de la mano de diversos colectivos que reclaman entre otras cuestiones, una moratoria turística, la implantación de la ecotasa y la aplicación de una Ley de Residencia, los mismos se han visto intensificados en los últimos tiempos hasta llegar incluso a enfrentamientos directos con los propios turistas.