Sigue sin esclarecerse el
asalto de los tres encapuchados a la casa de
María José Hidalgo y no está claro que se trate de la misma banda que atracó un día después un chalet en la Costa d’en Blanes.
Javier Hidalgo ha abandonado la casa de su hermana y se ha ido a la de sus suegros, en Cala Ratjada.
La Guardia Civil sigue las
pesquisas de los malhechores que irrumpieron en la madrugada del miércoles en el domicilio de la directora general de Air Europa en Puig de Ros, en Llucmajor. En la misma mañana del miércoles
interrogaron al único hijo varón del dueño del Grupo Globalia.
Un sereno Javier Hidalgo fue respondiendo con tranquilidad a todas las preguntas de los miembros de la Benemérita. Según ha sabido
mallorcadiario.com, Hidalgo junior
dio “la talla en el interrogatorio”. Posteriormente se fue a jugar una partida de golf con sus amigos Ferrer y Borrás, a Maioris.
Días después del suceso Javier Hidalgo y su pareja se fueron a vivir a
la casa que el suegro tiene en Cala Ratjada. El padre de su compañera es un conocido empresario mallorquín de ocio y hostelero,
Pascual Ribot, propietario de una conocida discoteca y de un agroturismo en el término de Capdepera.
Según ha comentado Ribot a unos amigos de la zona, el alto directivo de Globalia, creador de Pepephone y dueño de una empresa de modelos con sede en Barcelona, aún
no entiende el motivo del asalto y se muestra preocupado. Su hermana, por su parte,
deja Mallorca por una temporada.