El presidente de la comisión gestora del PSOE, Javier Fernández, ha afirmado este lunes que "la peor de las soluciones" tanto para su partido como para España es ir a nuevas elecciones y que los socialistas asumen el "desgaste" que eso les produciría, dada, también, la situación en la que se encuentran.
De hecho, ha explicado que el primer objetivo del órgano que dirigirá es "bajar el nivel de temperatura" interna porque el "incendio" les está "consumiendo".
En su primera rueda de prensa como presidente de la gestora que dirigirá el partido hasta que haya un nuevo Congreso, Fernández no ha adelantado qué postura adoptará el PSOE a partir de ahora y ha insistido en que la decisión le corresponde al Comité Federal. Eso sí, ha explicado que antes de reunir de nuevo a este órgano quiere oír a los secretarios generales de las federaciones, en el seno del Consejo de Política Federal.
A título personal, ha insistido en que unas nuevas elecciones es el peor de los escenarios y ha explicado que no contempla que pueda darse libertad de voto en el Grupo Socialista en una nueva hipotética investidura de Mariano Rajoy. "No lo hemos hablado, pero no me lo he planteado ni me lo planteo", ha dicho.
Fernández no ha aclarado si el PSOE se abstendrá y ha insistido en que ésta decisión le corresponde al Comité Federal, que sigue constituido después de la disolución de la Ejecutiva Federal. Ha dicho que habrá que valorar las alternativas que existen y ha explicado que él, como presidente de la gestora, no debe pronunciarse en su nombre, porque, además, la gestora "no es una dirección política", sino que es el Comité Federal el que tiene que tomar la decisión y modificar, si cabe, las resoluciones adoptadas en diciembre y en julio, cuando se acordó el 'no' al Gobierno del PP, porque siguen vigentes.
En ese documento, ha recordado, se comprometieron a no votar a favor de los 'populares' y a no abstenerse, que, ha querido recalcar, "no son la misma cosa".
"Y como eso sigue vigente, es ése órgano el que tiene que pronunciarse en el caso de que haya que actuar de otra manera cuando llegue el momento", ha insistido, para después señalar que será entonces, en ese debate, cuando él dé su opinión "con absoluta claridad".
Por lo pronto, sí ha avanzado que, como presidente de Asturias, tiene claro que lo que no quiere es nuevas elecciones. Fernández ha admitido que, ahora mismo, "cualquier solución al problema de la gobernabilidad de España pasa por el PSOE y es un problema para el PSOE". De esta manera, ha dicho, ocurra lo que ocurra, los socialistas van a tener un problema y van a asumir "un desgaste". Pero, aun así, ha defendido que, "la peor" de las soluciones, a su juicio, es "ir a las elecciones" y, como argumento, ha esgrimido las encuestas que se han publicado este mismo lunes y que pronostican una debacle para el PSOE.