La obra ‘Ruinas, Cicatrices y Huellas’, Premio Nacional de Arquitectura 2024

La recuperación de las ruinas de la iglesia de San Agustín encara su inicio material en el 60 aniversario del trágico incendio que asoló este emblemático edificio histórico de La Laguna, única Ciudad Patrimonio de la Humanidad de Canarias, y lo hace, además, proponiendo un interesante debate sobre la rehabilitación y conservación del patrimonio. Uno de sus principales adalides en este reto es la publicación Ruinas, Cicatrices y Huellas del Estudio SIC, editada por la Concejalía de Patrimonio Cultural del Ayuntamiento de La Laguna y la Consejería de Cultura del Gobierno de Canarias, que acaba de obtener el Premio Nacional de Arquitectura 2024, en la categoría Compromiso.

El Consejo Superior de los Colegios de Arquitectos de España (CSCAE) anunció ayer su veredicto, en una ceremonia celebrada en el Teatro Reina Victoria de Madrid y donde destacó el “enfoque multidisciplinario de este trabajo”, el cual “documenta la rehabilitación de un sitio histórico y promueve la discusión sobre la conservación del patrimonio arquitectónico”.

Esta obra del Estudio SIC, formado por Esaú Acosta, Miguel Jaenicke y Teresa Marraco, “documenta la restauración de las ruinas de San Agustín, resaltando hallazgos que narran la historia del lugar y el camino para su recuperación. Su narrativa recorre el pasado y futuro de este importante edificio, que trasciende la historia para convertirse en memoria colectiva, profundizando en cada hallazgo y permitiendo un recorrido por los siglos y por el propio proceso que nos ha llevado hasta el proyecto actual”, destaca el concejal de Patrimonio Cultural de La Laguna, Adolfo Cordobés.

El edil, que felicitó al equipo responsable de este completísimo trabajo, explicó que “estas ruinas son un terrible recordatorio del mayor miedo en una ciudad histórica que, curiosamente, se erigió junto al agua, el fuego. Esperamos que, muy pronto, podamos devolver a la ciudadanía una parte tan importante de la memoria lagunera, convirtiendo tan infausto suceso en un espacio de esperanza y de convivencia”.

Las obras, en el segundo semestre de este año

En este sentido, el concejal de Obras e Infraestructuras, Ángel Hernández Chinea, anunció que, "una vez que ha sido aprobada la necesaria modificación del proyecto, que ya cuenta con los informes favorables del Cabildo y del Servicio de Gestión del Casco, hemos dado el preceptivo trámite de audiencia a la contrata para poner en su conocimiento el proyecto modificado aprobado y, así, continuar con los trabajos en el segundo semestre de este año”.

Para llegar hasta aquí, trabajos como el del Estudio SIC han sido una parte fundamental del proceso. El arquitecto Esaú Acosta valoró que “es un orgullo que una obra lagunera y canaria haya sido reconocida en una convocatoria con tantos competidores y de tan alta calidad”. El trabajo galardonado “implica un compromiso con la preservación de obras históricas mediante una reconstrucción que no genere falsos históricos ni restituciones, sino que preserve lo que queda. Esperamos que el libro sea una puerta de entrada a este espacio y que pronto se pueda abrir al público”.

El veredicto del jurado de los Premios Arquitectura 2024 destaca cómo esta obra aborda la rehabilitación desde diversas perspectivas, incluyendo la conservación de ruinas, cicatrices y huellas como parte de la memoria colectiva que, junto con la reutilización de objetos preexistentes, permite a las y los lectores que exploren las ruinas mientras descubren cada hallazgo.

Este enfoque inclusivo en la divulgación del patrimonio arquitectónico lo posiciona, valora el jurado, como una valiosa contribución para entender y apreciar tanto la historia como el proceso. Y, así, le ha distinguido con el Premio Compromiso 2024, que distingue otras formas de ejercicio profesional, como trabajos de divulgación y difusión arquitectónica, innovación o emprendimiento.

Estos galardones, patrocinados por Compac, buscan reconocer la excelencia arquitectónica en seis categorías basadas en valores, como la sostenibilidad, el compromiso o la rehabilitación. Por tanto, no solo valoran el diseño y la ejecución de las obras, sino también el compromiso de sus arquitectos por mejorar el entorno y avanzar hacia una sociedad más sostenible desde los ámbitos social, económico y medioambiental.

Los 27 proyectos finalistas que han optado a los premios han sido escogidos entre las 185 propuestas seleccionadas por los Comités de Selección, constituidos en los Colegios Oficiales de Arquitectos y Consejos Autonómicos y dentro de sus ámbitos territoriales, en la primera fase de los premios, a los que se presentaron 497 propuestas en esta edición.