OPINION

Narcisista y ególatra (y 2)

Miquel Pascual Aguiló | Sábado 17 de junio de 2017

Como dirían los Monthy Pyton. "Él es el verdadero Mesías y lo sé porque he seguido a muchos", y él se lo cree.

Ya en el mes de febrero del año 2014 los Colectivos de Jóvenes Comunistas de la Universidad Complutense lanzaron un duro y directo ataque al entonces politólogo y tertuliano Iglesias. Entre otras perlas le acusaron, diciendo de él que: "Tiene el ego a la altura de Carrero Blanco". Añadiendo que ese inmenso ego es el que le lleva a afirmar que los que tenemos un nivel socioeconómico más bajo que él somos gentuza.

Le acusaron de "farsante", de lavarse las manos en la "lucha estudiantil" y de no acudir a ninguna asamblea, a diferencia de otros profesores. También criticaron a los otros dos docentes que participaron en la plataforma para concurrir a las elecciones europeas, Juan Carlos Monedero y Ariel Jerez.

Tanto el idioma inglés como el alemán tienen una frase para definir lo que hacen las personas sin talento (por muchos títulos universitarios que tengan) para subir en el escalafón de cualquier empresa y sobre manera en la carrera política. Kiss up kick down es una de esas bellas expresiones inglesas que con una gran concreción tan difíciles resultan de traducir al castellano, al menos de forma tan certera. Sería algo así como “besando a los de arriba y pateando a los de abajo”, o el famoso fahraht system del alemán, o el sistema bicicleta que significa doblegado ante el de arriba, pisando a los de abajo.

El esperpéntico espectáculo que han protagonizado Iglesias y compañía en el Congreso de Diputados esta semana, nos he hecho recordad la frase: “El respeto como la confianza se gana, la honestidad se aprecia y la lealtad se devuelve”.

Demostró, una vez más ser un cínico hipócrita, que se la coge con papel de fumar cuando le toca recibir a él.

La intervención en la tribuna de oradores del siempre navajero, faltón Rafael Hernando del Partido Popular, que tal parece regodearse en la barro de la inmundicia oratoria, al que tanto le da intentar pegar a Rubalcaba, como insultar a padres, jueces y víctimas del franquismo y que, en esta ocasión, le mentó a Iglesias la relación sentimental con la ahora portavoz de Podemos en el Parlamento, de la que por cierto tanto ella como él hacen públicas demostraciones, pareció que le sorprendía a Iglesias y que se ofendía, demostrando una vez más que tiene dos varas de medir muy diferentes.

Parece que el macho alfa de la manada morada (que si en algo ha destacado ha sido por las purgas internas y por premiar políticamente a sus parejas del momento), se ha olvidado de cuando todavía no era nadie en política, sólo un tertuliano promocionado por Atresmedia en La Sexta Noche, se hartó de vomitar unas críticas demoledoras contra Ana Botella por ser esposa de Aznar y ocupar un cargo público, “una mujer cuya única fuerza proviene de ser esposa de su marido”, decía. ¡Cuando le dan la medicación a él no le gusta!. En fin, lo de siempre, otro bocazas embustero, mucho criticar el nepotismo de los otros y hablar de la democracia interna pero a la hora de la verdad, como todos, sucumbe a la tentación de nombrar a dedo a sus elegidos y de beneficiar a las parientas.

Fue la diputada de Coalición Canaria en el Congreso, Ana Oramas, quién arremetiendo contra el líder de Podemos hizo mención a su machismo cuando le recordó la frase que éste le dijo a su compañero Monedero refiriéndose a la periodista Mariló Montero: “La azotaría hasta que sangrase”, si unimos esta frase con el hecho de que solo ligue con mujeres orgánicamente a sus órdenes (primero las promociona y luego le abandonan) llegaremos a la conclusión de que tiene algún déficit mental y sexual que lo hace mejor candidato a ocupar un sillón en la consulta de un psiquiatra que en el palacio de la Moncloa.

La famosa frase: “Quién no quiso cuando pudo, no podrá cuando quiera”, fue la que le tiró en cara la diputada Oramas, que describe con total acierto el ejercicio propagandístico de la fracasada moción de censura, interpuesta a mayor y mejor gloria de Iglesias, dirigida más a dar respuesta a su egolatría, a intentar cortocircuitar las primarias del PSOE que a intentar tumbar a Mariano Rajoy como Presidente del Gobierno, en ambas cosas fracasó y quedó claro que los únicos apoyos que tiene para ser él el elegido son los de EH Bildu y ERC, que para más burla y escarnio son los partidos que quieren romper a España, ¡menudo aval para intentar ser presidente del Gobierno de España!.