Algunos recodarán el viejo himno anarquista que en su estribillo rezaba: "¡A las barricadas, a las barricadas en defensa de la confederación!". A decir de las imágenes que en primicia les ofreció mallorcadiario.com de los primeras espadas de Podemos cenando en un conocido -y no barato- restaurante del Molinar, el himno revolucionario ha cambiado su letra: "¡A las mariscadas!".
Muchos de los que acudieron a Sa Riera no pueden permitirse una cena así
Tras el mitin en el Parc de Sa Riera del pasado jueves, Pablo Iglesias, Alberto Jarabo, Juan Pedro Yllanes e Irene Montero, entre otros, disfrutaron de una cena de categoría, compuesta de caldereta de langosta, calamares de potera y carpaccio de gamba roja. Una buena elección gastronómica, pero imprudente en exceso pues muchos de los simpatizantes de Podem que acudieron a escucharles a Sa Riera no pueden permitirse una cena así. Nada tiene de malo que Iglesias, Jarabo y compañía coman marisco, como si quisieran comer caviar iraní, siempre que se lo paguen ellos, cosa que nadie ha puesto en duda. Pero a parte del derecho hay algo que se llama oportunidad política.
En un país con los índices de paro, pobreza y emergencia social que exhibe España, como continuamente recuerdan los podemitas, lo más adecuado hubiese sido evitar imágenes de candidatos políticos sentados a manteles en un restaurante caro de Palma comiendo marisco. Cabe preguntarse lo que habrán pensado sus seguidores y si no hubiese sido mejor cenar de pa amb oli, huyendo de la inapropiada ostentación exhibida por los dirigentes de Podemos.