Cumpliendo las previsiones de la Autoridad Portuaria de Santa Cruz de Tenerife, ayer se botó desde la cajonera SATO LEVANTE, atracada en la Dársena del Este del puerto chicharrero, el último de los treinta y dos cajones necesarios para dar forma al dique exterior del puerto de Granadilla.
Dicha consecución supone un nuevo paso adelante para una infraestructura que, en palabras del presidente de Puertos de Tenerife, Ricardo Melchior, “se espera pueda acoger a finales de este año sus primeros buques y que se encuentre operativa entre 2017 y 2018”.
Con la finalización de esta última unidad, ayer eran seis los cajones atracados en el puerto de Santa Cruz de Tenerife, cuatro en la Dársena de Este y dos en la de Los Llanos, pendientes de su traslado a las aguas ya abrigadas del puerto de Granadilla. No obstante, las buenas condiciones marítimas posibilitarán que hoy mismo uno de ellos sea remolcado hacia el sur para ser fondeado en su ubicación definitiva, al igual que otros dieciséis que ya ocupan su puesto en el dique.
Actualmente son diez los cajones prefondeados en aguas de Granadilla, a la espera de que el avance de la obra permita su fondeo en la alineación que le corresponde.
Más en detalle, dos cajones integran la primera alineación del dique exterior, doce la segunda y quince la tercera, culminando la infraestructura tres cajones en el morro.
Las obras de abrigo del puerto de Granadilla cuentan con financiación europea en Fondos de Cohesión.