Diecisiete años después de conquistar su primer título, con los 40 recién cumplidos, el brasileño Uri Valadão se proclamó este sábado campeón del mundo de bodyboard en la categoría absoluta. Lo logró tras la derrota en semifinales del francés Pierre-Louis Costes, su último rival con opciones, frente a su compatriota Amaury Lavernhe, en el Gran Canaria Frontón King 2025, última y más esperada parada del IBC World Tour, celebrada en la costa de Gáldar, epicentro mundial del bodyboard durante dos semanas de pura emoción.
Lavernhe, por su parte, siguió avanzando hasta coronarse Rey de El Frontón, imponiéndose en la final al local Lionel Medina. Un duelo con historia: ambos ya se habían enfrentado en 2020, aunque entonces la victoria fue para el canario. Esta vez, el francés afincado en Gáldar —doble campeón del mundo y profundo conocedor de la ola— volvió a demostrar por qué es una leyenda viva, desplegando un surfing impecable y aprovechando su experiencia para ampliar su reinado con un cuarto título en El Frontón.
En la categoría júnior, el francés Louka Zaniotto se impuso al grancanario Alberto Pérez, proclamándose campeón del mundo y Príncipe del Frontón en una misma jornada. Por primera vez, la gran final reunió a todos los participantes del año con las mismas opciones, un formato que añadió emoción a una categoría que es ya una auténtica cantera de talentos.
Un escenario épico para un desenlace histórico
Cielo azul, sol radiante y olas de hasta seis metros con izquierdas y derechas perfectas. El Frontón rugió como solo él sabe hacerlo, confirmando por qué está considerada la mejor ola del mundo para el bodyboard. Las condiciones fueron extremas, pero ideales para el espectáculo: un festival de maniobras radicales, puntuaciones altísimas y emoción a cada instante.
El público, abarrotando el acantilado, respondió como nunca. Y miles de seguidores de todo el planeta vivieron la jornada final por streaming, batiendo récords de audiencia. La atmósfera fue la de un acontecimiento deportivo de primer nivel, donde la naturaleza y el talento se unieron para escribir una nueva página en la historia del bodyboard mundial.
El Gran Canaria Frontón King repartió en esta edición 35.000 dólares entre los 32 mejores de la categoría absoluta y 10.000 dólares entre los 16 primeros de la júnior.
Diecisiete años después, el sueño de Uri Valadão se hace realidad
A sus 40 años, Uri Valadão vivió su segundo título mundial con una mezcla de emoción, madurez y gratitud. “Llevaba 17 años persiguiendo este sueño: volver a estar en la lucha por el campeonato del mundo, aquí, en El Frontón. La energía de la gente de Canarias, la ola, todo… ha sido una experiencia increíble. Es el mejor momento de mi vida”, confesó emocionado con el trofeo en las manos.
Su primer título mundial llegó en 2008, cuando la prueba se disputaba en El Confital, pero fue ahora, en la costa norte de Gran Canaria, donde cerró el círculo de su carrera con una victoria que lo consolida como uno de los grandes referentes del deporte.
Discípulo y heredero del estilo radical del legendario Guilherme Tâmega, Valadão explicó que este ha sido su mejor año de forma: “He trabajado mucho, sobre todo mental y físicamente. Me siento más completo que nunca. Sigo siendo radical, pero con más equilibrio… y lo más importante: sigo disfrutando cada ola como en 2008”.
Valadão tuvo además palabras de agradecimiento para la afición, que lo ha arropado estos días casi como un local más: “Las Islas siempre han sido un lugar muy especial para mi, estoy enamorado de su gente desde que llegué, y no tengo palabras para agradecer todo el apoyo que me han brindado estos días”, comentó.
El día más exigente: olas, emoción y eliminación de favoritos
La jornada final comenzó con los cuartos de final de la categoría absoluta y las sorpresas no tardaron en llegar. De los tres aspirantes al título mundial, solo Pierre-Louis Costes logró avanzar a semifinales. Uri Valadão cayó ante su compatriota Éder Luciano, mientras que el grancanario Armide Soliveres, quien ostentaba hasta hoy el título mundial, no pudo superar la solidez de Amaury Lavernhe, que repitió así la historia del año anterior, aunque a la inversa: si en 2024 le dio el título al canario venciendo a Costes, esta vez se lo arrebató directamente en el agua. “Yo tengo mucho respeto por todos, pero cuando entro al agua, entro a ganar”, había avisado Lavherne antes de competir. Dicho y hecho. Llegó hasta la final y conquistó su cuarto trono del Frontón, ante un Lionel Medina que volvió a dejar claro por qué es uno de los locales más espectaculares del circuito.
“Vivo para este deporte, me he preparado muy intensamente las últimas semanas, pero además hoy el Frontón nos ha ofrecido olas que no veíamos aquí hace seis meses; superar a riders como Costes o Soliveres y volver a ganar el evento ha sido increíble, un viaje emocional muy fuerte”, comentó.
Susto en la final júnior
La final júnior tuvo un desenlace inesperado. El joven grancanario Alberto Pérez tuvo que retirarse a los diez minutos de manga tras una maniobra arriesgada: un rollo gigante en la sección más crítica de una ola extrema. En la caída, el labio de la ola impactó sobre su espalda, y la serie posterior lo dejó exhausto.
El francés Louka Zaniotto, de tan solo 16 años, se mantuvo firme y logró hacerse con la victoria y el título mundial. Clasificado en la prueba de Marruecos, Zaniotto ha competido durante todo el año al nivel de los absolutos, confirmando un talento precoz que apunta a marcar una nueva generación en el bodyboard europeo.