Las patologías más comunes de los migrantes tratados en el centro sanitario fueron la anemia, la necrosis muscular y lesiones cutáneas derivadas de la escasa movilidad y el contacto prolongado con agua salada contaminada dentro de la propia embarcación.
El complejo hospitalario atendió a 485 personas migrantes llegados por mar durante 2023, en su mayoría varones jóvenes, de las cuales 93 necesitaron ingreso hospitalario y una cuarta parte precisó su atención en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI).
El equipo de profesionales, conformado por facultativos de Dermatología y Cirugía Plástica, ha publicado sus conclusiones en la revista oficial de la Asociación Española de Dermatología y Venereología (AEDV), Actas Dermo-Sifiliográficas, donde explican que las condiciones extremas del viaje en este tipo de embarcaciones desencadenan cuadros clínicos complejos y graves, siendo las lesiones cutáneas y de partes blandas las que marcan muchos de los pronósticos de los pacientes.
En concreto, el estudio señala que las lesiones cutáneas se localizaron principalmente en piernas, pies, glúteos y sacro, y que una gran parte de ellas derivaron en complicaciones graves, por lo que un tercio de los pacientes precisaron cirugía.
En los cultivos microbiológicos se identificaron bacterias como Staphylococcus aureus, Pseudomonas aeruginosa y Shewanella algae, vinculadas a las condiciones insalubres de los viajes en embarcaciones precarias.
El trabajo pone de manifiesto la relevancia de un manejo multidisciplinar de estos pacientes, para atenderlos de forma adecuada y reducir las secuelas que puedan producirse a largo plazo.
El Hospital Universitario Nuestra Señora de Candelaria es actualmente uno de los centros de referencia en el manejo de patologías de personas migrantes como el pie de patera.