Un parapentista de 50 años resultó herido de carácter moderado tras un accidente ocurrido en la LZ-2, cerca de Puerto Calero, en el municipio de Tías, Lanzarote. El incidente se reportó el 8 de febrero de 2025 a las 11:26 horas. El Servicio de Urgencias Canario (SUC) activó una ambulancia medicalizada y dos unidades de soporte vital básico para atender al afectado, quien fue trasladado al Hospital Doctor José Molina Orosa. Los bomberos rescataron al herido y la Policía Local y la Guardia Civil colaboraron en la gestión del incidente.
Un accidente de parapente ocurrido en la LZ-2, cerca de la rotonda hacia Puerto Calero, en el municipio de Tías, ha dejado a un varón de 50 años con traumatismos de carácter moderado. El incidente tuvo lugar el 8 de febrero de 2025 a las 11:26 horas.
El Servicio de Urgencias Canario (SUC) fue alertado del suceso y activó rápidamente los recursos necesarios para atender al afectado. Una ambulancia medicalizada y dos unidades de soporte vital básico fueron enviadas al lugar del accidente.
Según la información proporcionada por el SUC, el hombre presentaba varios traumatismos al momento de ser asistido. Tras recibir atención inicial, fue trasladado en una ambulancia medicalizada al Hospital Doctor José Molina Orosa para recibir tratamiento especializado.
El Centro Coordinador de Emergencias y Seguridad (CECOES) 112 del Gobierno de Canarias recibió la alerta sobre la caída accidental del parapentista y activó inmediatamente los servicios correspondientes. Además del SUC, participaron en la operación los Bomberos del Consorcio de Seguridad, Emergencias, Salvamento, Prevención y Extinción de Incendios de Lanzarote, así como la Policía Local y la Guardia Civil.
Los bomberos desempeñaron un papel crucial en el rescate del afectado, trasladándolo a los recursos sanitarios que habían llegado al lugar. La Guardia Civil se encargó del atestado correspondiente mientras que la Policía Local colaboró con las labores de emergencia.
A medida que se desarrollaban los acontecimientos, las autoridades trabajaron para asegurar la seguridad en la zona y gestionar adecuadamente el incidente. Este suceso pone nuevamente en evidencia los riesgos asociados a actividades deportivas como el parapente.