Así, los populares lamentan que, cuando en todos los municipios de la isla se han cancelado o pospuesto eventos lúdicos y festivos, Puerto de la Cruz se ha convertido en “vergüenza nacional” por este espectáculo inapropiado en las circunstancias actuales y que tiene un único responsable político directo: el alcalde de la ciudad.
De esta manera, el Partido Popular considera que la deriva fiestera y caótica en la que se encuentra Marco González, junto a su equipo de Gobierno, ha puesto en grave riesgo las capacidades de ayuda y respuesta de los equipos de seguridad y emergencias, ya que tuvieron que estar pendientes de que no ocurriese ninguna clase de desgracia durante la celebración del citado festival.
Los populares instan al alcalde a que asuma las responsabilidades políticas que le corresponden por su actitud negligente e incívica y por tanto, dimita por respeto a los portuenses.